creer en Dios es una opción genial, un regalo que sólo al mismísimo dios se le hubiera podido ocurrir concedernos. sólo a dios se le ocurre ser tan humilde para dejarnos pensar que seremos capaces de ponerle nombre a todo, sólo a dios se le ocurre vivir en la sutileza, convertir los milagros en imperceptibles acontecimientos, disfrazarse de sonrisa, sólo a dios se le ocurriría dejarnos creer que fuimos expulsados del paraíso...
dios mío, no me obligues a creer lo que digan,
yo sé que existes porque amanece.
ale sanz
2 comentarios:
un girasol ama a esta gotita de agua, me das paz amiga .
y mirá si es grande el Flaquito. Tan grande que nos puso juntas.
Te amo amiga
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